Jessica Oceguera — Independencia Económica

Independencia Económica:El camino real hacia la libertad de las mujeres

A lo largo de mi vida, y de mi trabajo en Mujeres Transformando a México, entendí una verdad que casi nadie dice en voz alta: sin independencia económica, es muy difícil romper el ciclo de la violencia. Lo afirmo desde la experiencia y el testimonio de miles de mujeres que he acompañado en procesos de reconstrucción personal.

En México solemos hablar de violencia de género desde las cifras, las denuncias y las medidas de protección. Pero pocas veces tocamos la raíz que mantiene a tantas mujeres atrapadas: la dependencia financiera. La violencia económica, cuando alguien controla tu dinero, te impide trabajar o te obliga a entregarle tu salario, es una de las formas más silenciosas y efectivas de sometimiento. Lo he visto una y otra vez. Y también lo viví en carne propia.

Mi historia, marcada por momentos difíciles y nuevas oportunidades para empezar de cero, me enseñó algo fundamental:

La independencia económica es la base de cualquier verdadera libertad. Por eso lo digo con claridad: no es un privilegio, ni un concepto aspiracional.

La independencia económica es una necesidad urgente y la salida más sólida para alejarse definitivamente de la violencia.

Mi propósito: que ninguna mujer tenga que elegir entre seguridad y estabilidad

Mi trabajo como empresaria y como presidenta de Mujeres Transformando a México nace de esa convicción. Yo también tuve que reconstruirme. Y sé lo doloroso que es sentir que no hay alternativas, que no hay una puerta de salida.

Pero también sé lo que ocurre cuando una mujer recupera el control de sus ingresos y puede tomar sus propias decisiones con claridad y sin miedo. Ese es el punto donde empieza la transformación: cuando puedes sostenerte por ti misma y descubres que tu futuro no depende de nadie más.

Mujeres Transformando a México: independencia económica como motor de cambio

En la organización que presido no creemos en el asistencialismo. Creemos en ofrecer herramientas reales para que las mujeres puedan construir su independencia económica con sus propias manos.

Hemos acompañado a más de 50,000 mujeres a lo largo del país, brindándoles capacitación, redes de apoyo y conocimientos que fortalecen su autoestima, sus habilidades y su capacidad de generar ingresos. He visto cómo cambia una vida cuando la mujer deja de estar a la deriva y empieza a tomar decisiones desde la estabilidad.

Cuando una mujer controla sus finanzas, controla su destino.

La violencia es estructural. La solución también debe serlo

La violencia de género no inicia en el golpe. Inicia en el control, y el control casi siempre empieza por el dinero.

Por eso necesitamos soluciones estructurales, no solo medidas reactivas. La independencia económica es una herramienta preventiva y transformadora. Permite:

  • Crear autonomía,
  • Romper ciclos de dependencia,
  • Generar oportunidades reales,
  • Construir nuevas narrativas personales.

Nuestro enfoque combina educación financiera, emprendimiento y acompañamiento. No damos un pescado; enseñamos a pescar… y a construir la empresa pesquera.

México debe poner la independencia económica en el centro de la estrategia

Si de verdad queremos reducir la violencia contra las mujeres, debemos colocar la independencia económica como prioridad nacional. De lo contrario, seguiremos atacando los síntomas y no las causas.

Necesitamos políticas públicas, programas de capacitación, educación financiera accesible y oportunidades que permitan a cada mujer sostenerse y crecer.

Eso es lo que hago cada día. Eso es lo que impulsa mi visión:
Que más mujeres recuperen su libertad a través de la independencia económica.